Si usted es un empleador dueño de una pequeña empresa, ofrecer seguro médico a sus empleados puede contribuir al crecimiento de su negocio. Los beneficios de salud no solo mejoran los resultados de salud de sus empleados, sino que además contribuyen a mayor felicidad, compromiso y productividad del personal. Considere estos tres casos para tomar su decisión.
En un mercado laboral competitivo, ofrecer beneficios puede ser una manera fabulosa de captar y conservar excelentes empleados. De hecho, los empleados consideran al seguro médico más importante que cualquier otro beneficio1 y un 88% de los empleados considerarían seriamente el seguro médico, de la vista o dental al elegir entre un empleo con salario alto y uno con un salario más bajo pero con mejores beneficios2.
Si su empresa depende de empleados altamente capacitados, que son los más buscados, el seguro patrocinado por el empleador es un beneficio importante y competitivo. Esos trabajadores son difíciles de encontrar, y una vez que usted gasta sus recursos en contratarlos y capacitarlos, no quiere correr el riesgo de perderlos. Los costos de reemplazo son altos: en promedio, los empleadores pagan alrededor de un 33% del salario de un empleado que se va a fin de reemplazarle, según un estudio realizado por el Work Institute3.
Cuando los trabajadores que no tienen seguro médico se enferman, suelen evitar ir al médico. Como resultado, sufren los síntomas de la enfermedad y su trabajo se ve afectado mientras ellos tratan avanzar en sus tareas con esfuerzo. Mientras sus compañeros tratarán de hacer su trabajo, el estado de ánimo del empleado puede desmoronarse. Esto puede costarle a las empresas mucho tiempo y dinero. 4
Cuando los empleados tienen cobertura de salud, los dueños de las empresas pueden estar tranquilos sabiendo que los empleados que se enfermen tienen acceso a la atención médica que necesitan para volver a su trabajo.
Si bien no hay una norma absoluta que indique el momento en el que una pequeña empresa puede ofrecer beneficios a sus empleados, según Antara Dutta, una mentora de SCORE, organización de asesoramiento para pequeñas empresas, los expertos suelen recomendar a las compañías funcionar un mínimo de dos a tres años antes de incorporar los beneficios grupales. Este período le permite al propietario de una pequeña empresa consolidarse comercialmente y tener una idea de las ganancias que tiene por año antes de asumir un gasto considerable.
La cobertura patrocinada por el empleador no tiene sentido para las empresas pequeñas, pero para algunas puede ser una importante ventaja competitiva. Tomar la decisión de ofrecer beneficios de salud exige una cuidadosa evaluación de las necesidades de su empresa y de sus empleados. Y no olvide considerar lo intangible —ofrecer un seguro será visto por los empleados como algo positivo, aunque en última instancia no decidan beneficiarse con él.